En Un Bar

Vayamos a un bar, 

leamos poesía. 

Démonos el cielo, 

desde una silla.

Ante las letras, 

somos  nada. 

Un cuerpo,

un corazón, 

una bala.

Léeme, y no te rías,

aunque tu sonrisa sea,

la mejor poesía. 

Pasa de página, 

como antes, 

cuando vivías sin aliento,

y respiraste.  

Mírame en la última frase, 

y haz una pausa,

me encanta mirarte.

Atraviésame con tu voz, 

poséeme y asciéndeme. 

Desnúdame el alma, 

y déjame para luego.

Nos vemos en otra parte.

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𝑬𝒗𝒂 𝑪𝒆𝒓𝒆𝒛𝒐

2020